Arco de Barà. Cerca del pueblo de Roda de Barà se encuentra uno de los monumentos más característicos de la ciudad de Tarragona. Se trata del Arco de Barà, construido en la Via Augusta siguiendo el testamento de Licinio Sura. Se erigió en el siglo I a.C. durante el dominio del Imperio Romano en la península.
Se trata de un testimonio magnífico de la ingeniería y la arquitectura romanas. Se encuentra en una ubicación privilegiada, junto a la playa de Barà, y se alza majestuosamente como un recordatorio de la antigua ciudad romana de Tarraco. Este arco triunfal, construido en honor al emperador Augusto, mide aproximadamente 12 metros de altura y 8 metros de ancho, con una elegante fachada ricamente decorada.
La estructura del Arco de Barà está formada por tres arcos, el central de mayor tamaño y dos laterales más pequeños, sostenidos por columnas corintias. La fachada está adornada con relieves que representan escenas de batallas y conquistas, así como figuras mitológicas y divinidades romanas. Estos detalles artísticos dan fe de la riqueza cultural y la influencia romana en la región durante su apogeo.
Visitar el Arco de Barà
Visitar el Arco de Barà es una experiencia única para los amantes de la historia y la arqueología. Puedes explorar esta impresionante estructura, admirar los relieves y disfrutar de las impresionantes vistas del mar Mediterráneo. El sitio arqueológico que rodea el arco también alberga restos de una villa romana y un puerto, lo que proporciona una visión más completa de la vida en la antigua Tarraco.
Es un monumento que representa la grandeza del Imperio Romano y su legado perdura como un testimonio de la historia en la actualidad.
En este enlace se pueden consultar todos los horarios de visita, los precios y cualquier información adicional sobre el Arco de Barà: www.tarragonaturisme.cat